Especias
La melaza es uno de esos ingredientes que, aún siendo dulces, tienen cierto amargor que resulta poco agradable al paladar si se toma sola. Sin embargo, resulta curioso como combinada con azúcar y otras especias, principalmente jengibre, se obtiene un sabor altamente adictivo y delicioso. Me encanta la combinación, como muestra las galletas de jengibre.
En estas galletas se da una vuelta de tuerca más, combinándolas con mayor variedad de especias que proporcionan una amalgama perfecta con un ligerísimo gusto picante, sólo perceptible después de comerlas. Tan sutil que resulta indetectable en el momento de tomarlas.
Allspice
Jamaica, pimienta. Un nombre poco agraciado y bastante confuso. No es pimienta, aunque su forma de bola, dos o tres veces más grandes que la pimienta, y color lo parezcan. Su aroma recuerda a la canela o al clavo, recuerda, es un sabor totalmente distinto.
Más apropiado resulta su nombre en inglés “allspice”, que hace referencia a su facilidad para combinarla con otras, así como un sabor que podría considerarse una combinación de muchos otros pero de un modo difuso. Su uso está muy extendido y se emplea tanto en platos dulces (ejemplos son estas galletas, apple pie o la tarta Jamaica) como salados.
¿Dónde conseguirla? En “el imperio”, que yo sepa, sólo he podido conseguirla en grano en el rincón del Gourmet del CI. Para molerla he empelado un molinillo de café. En el viaje a Egipto me he provisto de una bolsita de ella, a precio mucho más económico y más aromática. Para su conservación, y evitar que pierda sus propiedades, guárdese en un recipiente hermético de cristal.
Recomendación. La precisión es un grado cuando hablamos de cantidades tan pequeñas. Para medir cucharillas, medias cucharas, medias cucharillas,… lo mejor es poder hacerse con unos medidores. Yo tengo dos juegos de medidores, uno comprado en Suecia y otro en el hipermercado (publicidad gratuita) “que por no estar en la playa hay que ir al campo”. Sé que también se pueden comprar, así lo han dicho en el blog, en ese escaso y famosísimo gran hipermercado en el que venden “Tente” a tamaño natural, las instrucciones están en un post-it y en el que las piezas, a veces, encajan y no sobran ni faltan (“Eso no se tira…”).
En casi todas las recetas, cuando hablo de cucharillas o cucharas, me refiero a ese tipo de medidas. Una cucharadilla es de un modo aproximado equivalente a 5 ml de volumen y una cucharada a 15 ml. “Desde que las tengo no he dejado de usarlas”.
Clo(i)ro
Bo(i)ro. Menuda (mala) fama le están dando. Ni sucedió exactamente en “mi pueblo”, que se lo pregunten a los habitantes de esa parroquia costera perteneciente al ayuntamiento. El sensacionalismo atrae a las masas y a esa nube de micrófonos que pretenden ganar audiencia a base de unas palabras muy medidas, o mejor, poco medidas y desmesuradas. Se trata de encontrar el adjetivo adecuado tanto antes como después del sustantivo. No me interesa el sensacionalismo ni la mala fama. De ”Dogvilles” está lleno el mundo.
Cuando, hace ya muchos años, desapareció un joven en los montes del Barbanza, recuerdo vagamente lo que algunas de las noticias decían: “…en un pequeño pueblo de la Galicia profunda…”. Ya años después, con la muerte (voluntaria) de Ramón Sampedro se decía algo así: “…y en Boiro quiso pasar sus últimos momentos mirando al mar, que tanto le había quitado, en busca de la paz y tranquilidad….”. Ahora prefiero no oírlo. Resulta curioso como gran parte del periodismo adapta los enclaves a las noticias, no al revés.
Estaría bien empleado si aprendiésemos la lección, si las noticias nos hiciesen reflexionar sólo un poco. Nada de nada. Se olvidan del fondo y se centran en la forma.
¿Qué subyace después de estas desgracias? ¿Dónde reside el problema? Muy sencillo, en la fama, en la obsesión por el dinero (fácil), la búsqueda de notoriedad. Estamos construyendo una sociedad poco solidaria, llena de falsos ídolos deseosos de vender cualquier producto, verdaderas marcas comerciales que se convierten en iconos de lo insustancial y nimio.
Lo dejo, era sólo un pequeño comentario. En general, el periodismo y yo nunca hemos hecho buenas migas, principalmente por aquellos a los que se le llena la boca con la palabra: “objetividad”. Amigos, la objetividad no existe.
Una imagen vale más que mil palabras… sólo un poco
Por lo menos hemos hablado un poco. Como anochece tempranito, entre 6:40 a 7:00 de la tarde, hemos ido al cine antes de ir a tomar algo. El paseo de la tarde también ha sido reconfortante y el entorno ha ayudado a que fluyesen las palabras. Sólo un poco.
Desde el mirador de “As lúas” y “Lobeira” la vista de la ría es espectacular. A Illa se distingue en la distancia, aparentemente lejos, pues llegar allí corriendo no me lleva más de una hora de ida y menos de una hora de vuelta. Sólo un poco.
El domingo, “el faro”. Hablamos, sólo un poco.
Se puede ser sincero, sólo un poco, en días como estos. Hablas de los miedos, sólo un poco, de las verdades. Pero en este estado, la tranquilidad del momento, uno no quiere herir, ni sólo un poco. Porque las verdades hieren, sólo un poco. Qué es lo que realmente deseo puede ofender, sólo un poco. No estoy decidido, sólo un poco. No quiero hacerte daño, ni un poco.
Ahora no tengo fuerzas para hablar de ello, ni un poco. “Tenemos que hablar…” en otro momento, sólo un poco.
Ingredientes
(2) En un cuenco batimos la manteca con la mantequilla y el azúcar hasta que quede pálido. Añadimos el huevo y la melaza, seguimos batiendo hasta que quede ligeramente homogéneo. Por último añadimos la mezcla de la harina.
La masa puede dejarse reposar en el frigorífico, así podremos formar las galletas más fácilmente y suelen quedar mejor. Yo he hecho unas pocas de inmediato y otras las he dejado reposar.
(3) Echamos azúcar blanco grano en un plato, formamos bolas con la masa y las rebozamos en el azúcar. Ponemos sobre una bandeja con papel de hornear o silicona, separadas suficientemente, y horneamos durante unos 10-15 minutos hasta que veamos (si nos llega la vista para ello) que empiezan a tostarse.
Cuanto más tiempo más crujientes.
Las guardamos para tomar cuando deseemos:
Me recuerdan mucho a las de jengibre. Sólo recuerdan, porque éstas tienen más contrastes de sabores y aromas. Ambas son muy adictivas, tienen “algo” que hace que no se pueda parar. Han dejado de existir en muy poco tiempo.
La melaza es uno de esos ingredientes que, aún siendo dulces, tienen cierto amargor que resulta poco agradable al paladar si se toma sola. Sin embargo, resulta curioso como combinada con azúcar y otras especias, principalmente jengibre, se obtiene un sabor altamente adictivo y delicioso. Me encanta la combinación, como muestra las galletas de jengibre.
En estas galletas se da una vuelta de tuerca más, combinándolas con mayor variedad de especias que proporcionan una amalgama perfecta con un ligerísimo gusto picante, sólo perceptible después de comerlas. Tan sutil que resulta indetectable en el momento de tomarlas.
Allspice
Jamaica, pimienta. Un nombre poco agraciado y bastante confuso. No es pimienta, aunque su forma de bola, dos o tres veces más grandes que la pimienta, y color lo parezcan. Su aroma recuerda a la canela o al clavo, recuerda, es un sabor totalmente distinto.
Más apropiado resulta su nombre en inglés “allspice”, que hace referencia a su facilidad para combinarla con otras, así como un sabor que podría considerarse una combinación de muchos otros pero de un modo difuso. Su uso está muy extendido y se emplea tanto en platos dulces (ejemplos son estas galletas, apple pie o la tarta Jamaica) como salados.
¿Dónde conseguirla? En “el imperio”, que yo sepa, sólo he podido conseguirla en grano en el rincón del Gourmet del CI. Para molerla he empelado un molinillo de café. En el viaje a Egipto me he provisto de una bolsita de ella, a precio mucho más económico y más aromática. Para su conservación, y evitar que pierda sus propiedades, guárdese en un recipiente hermético de cristal.
Recomendación. La precisión es un grado cuando hablamos de cantidades tan pequeñas. Para medir cucharillas, medias cucharas, medias cucharillas,… lo mejor es poder hacerse con unos medidores. Yo tengo dos juegos de medidores, uno comprado en Suecia y otro en el hipermercado (publicidad gratuita) “que por no estar en la playa hay que ir al campo”. Sé que también se pueden comprar, así lo han dicho en el blog, en ese escaso y famosísimo gran hipermercado en el que venden “Tente” a tamaño natural, las instrucciones están en un post-it y en el que las piezas, a veces, encajan y no sobran ni faltan (“Eso no se tira…”).
En casi todas las recetas, cuando hablo de cucharillas o cucharas, me refiero a ese tipo de medidas. Una cucharadilla es de un modo aproximado equivalente a 5 ml de volumen y una cucharada a 15 ml. “Desde que las tengo no he dejado de usarlas”.
Clo(i)ro
Bo(i)ro. Menuda (mala) fama le están dando. Ni sucedió exactamente en “mi pueblo”, que se lo pregunten a los habitantes de esa parroquia costera perteneciente al ayuntamiento. El sensacionalismo atrae a las masas y a esa nube de micrófonos que pretenden ganar audiencia a base de unas palabras muy medidas, o mejor, poco medidas y desmesuradas. Se trata de encontrar el adjetivo adecuado tanto antes como después del sustantivo. No me interesa el sensacionalismo ni la mala fama. De ”Dogvilles” está lleno el mundo.
Cuando, hace ya muchos años, desapareció un joven en los montes del Barbanza, recuerdo vagamente lo que algunas de las noticias decían: “…en un pequeño pueblo de la Galicia profunda…”. Ya años después, con la muerte (voluntaria) de Ramón Sampedro se decía algo así: “…y en Boiro quiso pasar sus últimos momentos mirando al mar, que tanto le había quitado, en busca de la paz y tranquilidad….”. Ahora prefiero no oírlo. Resulta curioso como gran parte del periodismo adapta los enclaves a las noticias, no al revés.
Estaría bien empleado si aprendiésemos la lección, si las noticias nos hiciesen reflexionar sólo un poco. Nada de nada. Se olvidan del fondo y se centran en la forma.
¿Qué subyace después de estas desgracias? ¿Dónde reside el problema? Muy sencillo, en la fama, en la obsesión por el dinero (fácil), la búsqueda de notoriedad. Estamos construyendo una sociedad poco solidaria, llena de falsos ídolos deseosos de vender cualquier producto, verdaderas marcas comerciales que se convierten en iconos de lo insustancial y nimio.
Lo dejo, era sólo un pequeño comentario. En general, el periodismo y yo nunca hemos hecho buenas migas, principalmente por aquellos a los que se le llena la boca con la palabra: “objetividad”. Amigos, la objetividad no existe.
Una imagen vale más que mil palabras… sólo un poco
Por lo menos hemos hablado un poco. Como anochece tempranito, entre 6:40 a 7:00 de la tarde, hemos ido al cine antes de ir a tomar algo. El paseo de la tarde también ha sido reconfortante y el entorno ha ayudado a que fluyesen las palabras. Sólo un poco.
Desde el mirador de “As lúas” y “Lobeira” la vista de la ría es espectacular. A Illa se distingue en la distancia, aparentemente lejos, pues llegar allí corriendo no me lleva más de una hora de ida y menos de una hora de vuelta. Sólo un poco.
El domingo, “el faro”. Hablamos, sólo un poco.
Se puede ser sincero, sólo un poco, en días como estos. Hablas de los miedos, sólo un poco, de las verdades. Pero en este estado, la tranquilidad del momento, uno no quiere herir, ni sólo un poco. Porque las verdades hieren, sólo un poco. Qué es lo que realmente deseo puede ofender, sólo un poco. No estoy decidido, sólo un poco. No quiero hacerte daño, ni un poco.
Ahora no tengo fuerzas para hablar de ello, ni un poco. “Tenemos que hablar…” en otro momento, sólo un poco.
Ingredientes
- 100 gr. de manteca a temperatura ambiente, mejor vegetal. [50 gr.]
- 60 gr. de mantequilla. [30 gr.]
- 220 gr. de azúcar moreno. [110 gr.]
- 120 ml de melaza. [60 ml]
- 1 huevo grande [30 gr.]
- 290 gr. de harina [145 gr.]
- 2 cucharillas de bicarbonato [1 cucharilla]
- 1 cucharilla de crémor tártaro. Opcional [½ cucharilla]
- 1 cucharilla de canela [½ cucharilla]
- ¾ [=½ + ¼] de cucharilla de jengibre [0,37 cucharilla = 1/3 aprox.]
- ½ cucharilla de clavo molido [¼ de cucharilla]
- ½ cucharilla de pimienta de jamaica molida [¼ de cucharilla]
- ¼ de cucharilla de pimentón picante (pimienta cayena) en polvo [una pizca]
- ½ cucharilla de sal [¼ de cucharilla]
- Azúcar grano para rebozar.
(2) En un cuenco batimos la manteca con la mantequilla y el azúcar hasta que quede pálido. Añadimos el huevo y la melaza, seguimos batiendo hasta que quede ligeramente homogéneo. Por último añadimos la mezcla de la harina.
La masa puede dejarse reposar en el frigorífico, así podremos formar las galletas más fácilmente y suelen quedar mejor. Yo he hecho unas pocas de inmediato y otras las he dejado reposar.
(3) Echamos azúcar blanco grano en un plato, formamos bolas con la masa y las rebozamos en el azúcar. Ponemos sobre una bandeja con papel de hornear o silicona, separadas suficientemente, y horneamos durante unos 10-15 minutos hasta que veamos (si nos llega la vista para ello) que empiezan a tostarse.
Cuanto más tiempo más crujientes.
Las guardamos para tomar cuando deseemos:
Me recuerdan mucho a las de jengibre. Sólo recuerdan, porque éstas tienen más contrastes de sabores y aromas. Ambas son muy adictivas, tienen “algo” que hace que no se pueda parar. Han dejado de existir en muy poco tiempo.
Estupendas fotos, me han encantado, en cuanto a las galletas, la melaza con que otro nombre se puede conseguir ??? se me ahn antojado sobre todo por la combinacion ... salu2 mex y en espera de tu respuesta, Patty :P
ResponderEliminarPerdón, no tengo mucho tiempo pero…
ResponderEliminarEs miel de caña (de azúcar); muy sano y rico en vitaminas y sales minerales... Algo así como “panela” líquida ;-)
En España la compro en los supermercados "Mercadona", marca “Nuestra Señora del Carmen” ;-), aunque por aquí se puede comprar también en herbolarios (pero hay que asegurarse que no sea de trigo). Apostaría a que es un producto muy común en México pero que empleáis otro nombre…. En inglés es “Molasses”.
P:
Sois un sol, gracias por responder, es que hay miel de caña, miel de abeja, jarabe de maiz, piloncillo o glucosa jajaja me hago un lio que pa que te cuento y si las hago no quiero errores, qu etengas una excelente tarde ;) Patty !
ResponderEliminaralguien dijo....Lo mucho se vuelve poco con solo desearlo un poco más.
ResponderEliminarEs lunes, ojala tengamos todos una semana estupenda.
Los dulces. Soy una novata, lo reconozco, pero a mi hija le encanta hacer dulces. Ayer probamos con los merengues y se nos quemaron, que pena de 4 claras de huevo, y las yemas que tengo ke gastar ya. Se aceptan sugerencias.
Besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarY seguimos cosechando éxitos con las recetas de Pepinho, el diestro de los fogones... Aquí R de Barna para explicar el lucimiento del 'finde'. Para empezar hice la exquisita tarta esponjosa de limón, seguí con el souflé de queso (yo le caramelicé un poco de cebolla picada en la mantequilla) y sobresaliente! Y ayer, para ir tirando durante la semana, esas golosas galletas blanco y negro de... Uf! todo delicioso.Me felicito, pero sobre todo por haberte encontrado. Hasta ahora.
ResponderEliminarYa se ve en las fotos y la receta que son nas galletas con una alta probabilidad de causar adicción... me encanta hornear dulces con melaza y especias, sobretodo ahora en otoño.
ResponderEliminarMagníficas recetas, preciosas fotos, estupendas entradas :)
Perdonad, pero tengo una semana tan ajetreada que no sé si podré responder demasiado. Perdón.
ResponderEliminarPor otro lado, por si no ha quedado claro, la Melaza es líquida y de la consistencia de la miel, más amarga y concentrada.
Resulta curioso pero la gente suele tener problemas para aprovechar las claras, no las yemas. Con las yemas se puede hacer una crema pastelera, y rellenar una base hojaldre con ella, poniendo unas manzanas por encima (fácil); puedes hacer una crema frita, unas yemas de Santa Teresa, un tocinillo de cielo, … y mucho más.
Si se han quemado las claras supongo que ha sido al secarlas. Los merengues se secan a muy baja temperatura (100-120º C) durante más de una hora. Si ha sido al fuego es que has hecho un merengue suizo, también me parece un poco extraño….
Gracias a tod@s, tengo que seguir… trabajando
A ver si puedo poner alguna de las muchas recetas que tengo pendientes.
Besos a tod@as.
hay pues ya me di vuelta al super y naá me querian vender miel de abeja o jarabe de maiz jajaja y no...la muchacha queria melaza, vere si tengo suerte la prox semana, voy a USA y tratare de conseguirla pero yo no me pierdo esta receta, salu2 Patty
ResponderEliminarPATY: si te encuentras en Mèxico, bùscala en alguna tienda Naturista, en algun wallmart o sam`s, que no te confundan con piloncillo, o malta etc. No es tan facil encontrarla en su consistencia de "molasses" osea como miel espesa, pero en l ciudad de Mèxico d.f. sera màs facil que en provincia! Suerte yo estoy el dìa de hoy tambien a la busqueda! te aviso como me va! Marisa
ResponderEliminarPATY: DIRECCION DE TIENDA NATURISTA EN MEXICO QUE VENDE: MELAZA.!!!!!
ResponderEliminarCalle Heriberto Frías No. 1355 Col. Del Valle Centro 03100 Benito Juárez Cd. de México D.F. (55)56056668
TE RECOMIENDO BUSCAR EN LAS TIENDAS (nATURISTAS)CERCANAS A TU DOMICILIO.
OJO!!! NO ES MIEL DE MAGUEY, NI ABEJA, NI DE AGAVE ETC. ES DE CAÑA!!!! marisa
Pintan bien... y deben saber bien tambien! Voy a probrar de hacerlas. Por otro lado, las especias (por lo menos en una dietetica de mi ciudad de unos 45000hab. en la provinca de Bs.As) se reeplazan con un preparado de especias bastante fuerte (por lo menos de aroma) que debe encajar a la perfección!
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