Nada es lo que parece
No son tortitas
… o no exactamente. La primera receta del día es la que menos se parece a una tortita, las restantes lo son pero en alguna de sus variantes, por así decirlo, cambia la forma pero no el contenido. Dos nombres para casi el mismo producto.
Tres recetas rápidas y sencillas, sobre todo la segunda, unas delicias para esos momentos de “mono dulce”, o no tan dulces, como veremos.
n-ésima
Lo he dicho tantas veces que creo que os vais a cansar de oírme: me encantan las tortitas, no sé si se nota. Ayer hice una nueva tarta, sin modestia aparte, muy original e impresionantemente interesante; no diré “rica” pues sólo he rebañado los bordes de la cuchara y los pucheros antes de dejarlos en el fregadero, pero estaba buenísima. Me parecía excesivo publicar dos tartas seguidas y más si esta semana no he “fotografiado” nada salado. Así que me veo con unas tortitas rápidas, muy rápidas, ricas, muy ricas y diferentes, algo diferentes.
Las pondré en dos entradas diferentes porque creo que ésta es la más distinta a las demás. Las otras, por su sencillez y parecido visual, creo que casan a la perfección.
El arte de sentirte mejor
Como M lleva unos días de buen ánimo, buena comida y cómoda en el trabajo, repercute muy positivamente en mi estado de ánimo. Se vuelve algo más tolerante, más permisiva, aunque siga teniendo esos momentos (inevitables) de cambios de humor por no se sabe qué.
Sin saber el porqué, mi ánimo ha mejorado, espero que ese cambio sea real y no sea fruto de un alto nivel de ocupación que haya ocultado los verdaderos problemas. Mi madre me llama con mucha más frecuencia, aunque sea sólo para preguntar cómo me encuentro, eso también anima. Con Martín sigo sin hablar pero espero verlo el fin de semana (San Martiño), tal vez os lo presente este lunes.
En el auto de papá
Sin noticias del seguro. Todavía no sabemos qué harán con ese estropicio, una croqueta, probablemente. Dos duros y santas pascuas. Para eso sirven los seguros, para hacerte creer que estás seguro y después te quedes sin coche y con dos duros, euros, perdón.
Hoy, si tenemos tiempo, empezaremos la búsqueda de un nuevo coche. Nos hemos juntado dos personas que no tenemos ni idea de ese tema. Esperemos que no nos den gato por liebre. Lo que sí tenemos claro es que debe ser grande y con prestaciones, nuestros viajes de fin de semana cada vez se parecen más a “hoy nos vamos de excursión”…. y eso que no tenemos hijos.
Por si acaso. Por si acaso llueve, unos paraguas y un chubasquero; por si acaso salimos por la noche, ropa para tal fin; por si acaso tengo tiempo para leer, 4 libros (¿para dos días?); por si acaso... Fijos son la ropa de deporte, las dos mudas (de todo), chaqueta, cazadoras, películas, portátil,… y el maletero lleno (el Golf de M lo tiene grande).
De vuelta ya necesitamos los asientos traseros, sobre todo si vamos a casa de mis padres: compras de supermercado, los productos caseros que nos puedan dar (miel, fruta,…), ropa (de compras) y un largo etcétera.
Bien pensado creo que va a tener que ser ¡un camión!
Torta de manzana
Ésta es originaria de la zona de Lyon, típicamente se suele hacer con manzanas y tiene cierto parecido con la receta de los crêpes.
(2) Levantamos la clara en punto de nieve y la añadimos con cuidado de forma envolvente. Rallamos la manzana en el último momento para que no se oxide (oscurezca) y la añadimos con cuidado a la mezcla.
(3) En este punto pueden hacerse como unas tortitas o como una torta de manzana. En realidad la receta es de una torta pero a mí me gusta hacerla tanto como torta como tortitas.
Calentamos una sartén antiadherente con mantequilla y procedemos a cocinarla como una tortilla, dándole la vuelta a media cocción. Es importante que la sartén esté bien caliente cuando se añade la masa, así evitaremos que no se pegue. Le daremos la vuelta con ayuda de un plato y dejaremos que se tueste un poco por cada lado. Si la hacemos gruesa, removeremos algo la masa para que se haga por dentro, bajando el fuego una vez veamos que no se haya pegado.
Espolvoreamos con azúcar glasé y disfrutamos, M me ha pedido que las repita.
No son tortitas
… o no exactamente. La primera receta del día es la que menos se parece a una tortita, las restantes lo son pero en alguna de sus variantes, por así decirlo, cambia la forma pero no el contenido. Dos nombres para casi el mismo producto.
Tres recetas rápidas y sencillas, sobre todo la segunda, unas delicias para esos momentos de “mono dulce”, o no tan dulces, como veremos.
n-ésima
Lo he dicho tantas veces que creo que os vais a cansar de oírme: me encantan las tortitas, no sé si se nota. Ayer hice una nueva tarta, sin modestia aparte, muy original e impresionantemente interesante; no diré “rica” pues sólo he rebañado los bordes de la cuchara y los pucheros antes de dejarlos en el fregadero, pero estaba buenísima. Me parecía excesivo publicar dos tartas seguidas y más si esta semana no he “fotografiado” nada salado. Así que me veo con unas tortitas rápidas, muy rápidas, ricas, muy ricas y diferentes, algo diferentes.
Las pondré en dos entradas diferentes porque creo que ésta es la más distinta a las demás. Las otras, por su sencillez y parecido visual, creo que casan a la perfección.
El arte de sentirte mejor
Como M lleva unos días de buen ánimo, buena comida y cómoda en el trabajo, repercute muy positivamente en mi estado de ánimo. Se vuelve algo más tolerante, más permisiva, aunque siga teniendo esos momentos (inevitables) de cambios de humor por no se sabe qué.
Sin saber el porqué, mi ánimo ha mejorado, espero que ese cambio sea real y no sea fruto de un alto nivel de ocupación que haya ocultado los verdaderos problemas. Mi madre me llama con mucha más frecuencia, aunque sea sólo para preguntar cómo me encuentro, eso también anima. Con Martín sigo sin hablar pero espero verlo el fin de semana (San Martiño), tal vez os lo presente este lunes.
En el auto de papá
Sin noticias del seguro. Todavía no sabemos qué harán con ese estropicio, una croqueta, probablemente. Dos duros y santas pascuas. Para eso sirven los seguros, para hacerte creer que estás seguro y después te quedes sin coche y con dos duros, euros, perdón.
Hoy, si tenemos tiempo, empezaremos la búsqueda de un nuevo coche. Nos hemos juntado dos personas que no tenemos ni idea de ese tema. Esperemos que no nos den gato por liebre. Lo que sí tenemos claro es que debe ser grande y con prestaciones, nuestros viajes de fin de semana cada vez se parecen más a “hoy nos vamos de excursión”…. y eso que no tenemos hijos.
Por si acaso. Por si acaso llueve, unos paraguas y un chubasquero; por si acaso salimos por la noche, ropa para tal fin; por si acaso tengo tiempo para leer, 4 libros (¿para dos días?); por si acaso... Fijos son la ropa de deporte, las dos mudas (de todo), chaqueta, cazadoras, películas, portátil,… y el maletero lleno (el Golf de M lo tiene grande).
De vuelta ya necesitamos los asientos traseros, sobre todo si vamos a casa de mis padres: compras de supermercado, los productos caseros que nos puedan dar (miel, fruta,…), ropa (de compras) y un largo etcétera.
Bien pensado creo que va a tener que ser ¡un camión!
Torta de manzana
Ésta es originaria de la zona de Lyon, típicamente se suele hacer con manzanas y tiene cierto parecido con la receta de los crêpes.
- 1 huevo, separada la yema de la clara.
- 50 gr. de azúcar
- 75 gr. de leche
- 30 gr. de mantequilla derretida.
- 75 gr. de harina
- Ralladura de limón
- 1 manzana grande rallada (reineta, golden, …)
- Una cucharada de agua de azahar (opcional)
(2) Levantamos la clara en punto de nieve y la añadimos con cuidado de forma envolvente. Rallamos la manzana en el último momento para que no se oxide (oscurezca) y la añadimos con cuidado a la mezcla.
(3) En este punto pueden hacerse como unas tortitas o como una torta de manzana. En realidad la receta es de una torta pero a mí me gusta hacerla tanto como torta como tortitas.
Calentamos una sartén antiadherente con mantequilla y procedemos a cocinarla como una tortilla, dándole la vuelta a media cocción. Es importante que la sartén esté bien caliente cuando se añade la masa, así evitaremos que no se pegue. Le daremos la vuelta con ayuda de un plato y dejaremos que se tueste un poco por cada lado. Si la hacemos gruesa, removeremos algo la masa para que se haga por dentro, bajando el fuego una vez veamos que no se haya pegado.
Espolvoreamos con azúcar glasé y disfrutamos, M me ha pedido que las repita.
Hola de nuevo (aunque no recuerdo si me presenté). El bizcocho con lavanda, espectacular pero esta tortita-torta-tortilla de manzana me ha conquistado. Genial reportaje y las fotos como siempre, de mordisco. ¡Gracias por el recetón!
ResponderEliminarNo va eso de tirar la piedra y esconder la mano... ahora quiero ver la otra tarta!! quien dijo q son necesarias las fotos "saladas"?? =)
ResponderEliminarGracias por tantas ideas, mi impresora ya no da a basto!!
Hace ya unas cuantas semanas que descubrí tu blog y desde entonces soy una adicta a el. La visita diaria es obligatoria, no solo por las recetas sino por todo lo que escribes.
ResponderEliminarY hoy al leer la receta de esta torta-tortita de manzana me has alegrado el dia, tiene que estar buenísima y parece super facil!!
Gracias por compartir todas estas cositas riquísimas con todos los que estamos al otro lado de la pantalla!!!
Hola,
ResponderEliminarGracias. Son tan facilitas (y las tortitas que vienen ahora) que uno nunca sabe que pensar. Muy ricas. Nunca se saben los gustos o apetencias de la gente, un poco de todo.
Con la tarta hay que tener paciencia, todo llegará. Me voy de fin de semana… y el domingo o lunes estaré de vuelta en el blog…
Besos y gracias.
jajaja que risa un camion fuiste benevolo, nitas un trailer de doble remolque jajaja, asi nos pasa a todos alguna vez que te vas 2 dias y pareciera que te cambias de cd, feliz fin de semana y ya esperaremos con ansias tus platicas y tus recetas, esta se lee rica rica, salu2 Patty ;)
ResponderEliminarLo más gracioso es que la mayoría de las cosas no las he usado...
ResponderEliminarAbrazos