“… si Dios quiere”
Acabo de llegar y ya me estoy despidiendo. Mañana sábado volveremos a volar con rumbo a oriente. Ni creo que tenga tiempo para contar algunas de aquellas cosas que quería decirte, a ti que me estás leyendo. Siempre igual.
Volveremos en unos siete días. En una hora estaremos haciendo las maletas, otros treinta minutos preparando los equipajes de mano y las cámaras y, ya tarde, nos acostaremos para levantarnos muy temprano. Taxi al aeropuerto.
Antes de todo eso, por si no vuelvo (siempre lo pienso pero nunca lo digo), quería poner una última receta. Como diría mi madre: “si Dios quiere, la semana que viene estaremos de vuelta”. El domingo o el lunes, quizás. Esta vez casi de modo definitivo, exceptuando fines de semana, dejaremos que las maletas descansen por una temporada.
Esta receta es una sorpresa. Riquísima, os lo aseguro, aunque digáis o penséis que no os gustan los “cakes” ni los pasteles. Es un pastel húmedo, mojado diría, un pastel que gana con los días (mejor pasadas unas 36 horas) envuelto en película de cocina y conservado frío. Si con el chocolate no fuese suficiente, encontrarse con la frambuesa (tal vez, mi combinación preferida con el chocolate) lo hace ideal para las visitas, los amigos o para despedirnos del verano y hacer más agradable la vuelta. El deseo y los días que nos restan hasta las siguientes vacaciones nos mantendrá vivos. El año que viene será igual, expectativas de unas vacaciones sobrevaloradas. Mi felicidad está en la espera, el anhelo y el recuerdo de esos días que no volverán.
Volveré “… si Dios quiere”. Prefiero pensar que no está en manos de ningún dios y sí en las manos humanas de todo un conjunto de profesionales que no juegan a los dados. Porque el azar se me da muy mal y mi relación con el más allá no es en este momento demasiado cordial.
Ha sido el verano que menos he leído, el que más maletas he preparado y en el que peor forma me he encontrado. Dolores, un día la pierna derecha, otro la izquierda, otro el lumbago, el cuello, sobrecarga en los tendones,.. ¿Me estaré haciendo mayor? ¿Necesito descansar?
Las clásicas anotaciones a pie de página de lecturas clásicas, pequeñas frases con ideas certeras que después intentaba desarrollar, se han quedado en eso, “pequeñas”:
“No cuentas más que contigo mismo…”
“Nadie debería estar solo en su vejez. Pero es inevitable”
“Tal vez no debería ser corredor, pero para eso he nacido”
Un sinfín de frases de un pequeño libro que cuando era niño no tenían la significación que en esta relectura he encontrado.
¿Nunca os ha pasado? Mejor no contarlo. Siempre he pensado que las alegrías no podían ser completas, llegaría ese momento de desastre que pondría las cosas en su sitio. Si algo iba bien es porque algo estaba fallando.
Una compra, el aparato no funcionaría o me faltaría algún cable; unas vacaciones, al final caería enfermo; una película, una decepción; una compañera, la relación se degradaría en el tiempo; un juguete, no llegaría… Si deseaba que algo no sucediese sólo tenía que contarlo y ya perdía su fuerza. Estaba garantizado el exorcismo de las palabras.
Se me hace tarde. Tenemos que hacer las maletas y pronto habrá que estar preparado.
Un beso muy fuerte [*].
Pepinho.
[*] Se dice “un fuerte abrazo” o “un beso”, a mí también me gusta la efusividad de “un fuerte beso”.
Ingredientes
Picamos el chocolate negro en trozos de medio centímetro o algo mayores. Mezclamos la harina con una pizca de sal, el cacao en polvo, la levadura química, el chocolate troceado y las frutas confitadas. Reservamos.
(2) En un cuenco grande vertemos la mantequilla reblandecida, el aceite, el azúcar y los huevos. Montamos (emulsionamos) con un batidor eléctrico de varillas (un levanta-claras) (es importante) durante unos cinco minutos, justo hasta que la mantequilla no tenga grumos y tenga el aspecto de una nata a medio montar. Si nos pasamos podría llegar a cortarse, tampoco sería un problema. Con ayuda de una espátula de plástico, vertemos delicadamente la mezcla de harina, de modo envolvente, desde el centro hacia los bordes y de abajo a arriba.
(3) Vertemos unos 2/3 de la masa sobre el molde y introducimos los discos de frambuesa congelados. Cubrimos con el tercio restante y justo antes de introducir el cake en el horno bajamos la temperatura hasta unos 180ºC, o algo menos, un cake no debe cocerse a más temperatura. Así aseguramos que durante los primeros minutos tendrá la temperatura adecuada para que crezca, después se hará de modo más homogéneo en el interior. Cocinamos en el horno precalentado cerca de unos 50 minutos, justo hasta el momento en que pinchando con una brocheta o cuchillo salga limpio.
Como norma general suelo programar la alarma para que suene unos 10 minutos antes, compruebo la cocción y vuelvo a programar la alarma para que suele algo después, dependiendo del estado que presente.
(4) Cuando esté hecho introducimos el molde en un baño de agua fría para que no siga cociéndose. Desmoldamos. Preparamos un jarabe con el agua y el azúcar hasta que hierva, retiramos y añadimos el licor. Con el cake todavía caliente, nos ayudamos de un pincel para empapar el pastel con el jarabe, hasta que esté bien mojado por todos lados (utilizares casi todo el jarabe). Cuando haya enfriado envolvemos en película transparente e introducimos en el frigorífico hasta el momento de consumir.
Si queremos darle todavía más calidad, el punto óptimo del cake empieza pasadas unas 36-48 horas. Antes estará riquísimo, después insuperable. Envuelto en película de cocina en el frigorífico se conserva muchos días (durante una semana delicioso, después nunca lo he probado) y nunca se resecará.
Os sorprenderá, seguro. Yo recomendaría hacerlo dos días antes del momento de degustar, estará en su estado óptimo.
Hacerlo o no están en vuestras manos, “quiera o no”.
Acabo de llegar y ya me estoy despidiendo. Mañana sábado volveremos a volar con rumbo a oriente. Ni creo que tenga tiempo para contar algunas de aquellas cosas que quería decirte, a ti que me estás leyendo. Siempre igual.
Volveremos en unos siete días. En una hora estaremos haciendo las maletas, otros treinta minutos preparando los equipajes de mano y las cámaras y, ya tarde, nos acostaremos para levantarnos muy temprano. Taxi al aeropuerto.
Antes de todo eso, por si no vuelvo (siempre lo pienso pero nunca lo digo), quería poner una última receta. Como diría mi madre: “si Dios quiere, la semana que viene estaremos de vuelta”. El domingo o el lunes, quizás. Esta vez casi de modo definitivo, exceptuando fines de semana, dejaremos que las maletas descansen por una temporada.
Esta receta es una sorpresa. Riquísima, os lo aseguro, aunque digáis o penséis que no os gustan los “cakes” ni los pasteles. Es un pastel húmedo, mojado diría, un pastel que gana con los días (mejor pasadas unas 36 horas) envuelto en película de cocina y conservado frío. Si con el chocolate no fuese suficiente, encontrarse con la frambuesa (tal vez, mi combinación preferida con el chocolate) lo hace ideal para las visitas, los amigos o para despedirnos del verano y hacer más agradable la vuelta. El deseo y los días que nos restan hasta las siguientes vacaciones nos mantendrá vivos. El año que viene será igual, expectativas de unas vacaciones sobrevaloradas. Mi felicidad está en la espera, el anhelo y el recuerdo de esos días que no volverán.
Volveré “… si Dios quiere”. Prefiero pensar que no está en manos de ningún dios y sí en las manos humanas de todo un conjunto de profesionales que no juegan a los dados. Porque el azar se me da muy mal y mi relación con el más allá no es en este momento demasiado cordial.
Ha sido el verano que menos he leído, el que más maletas he preparado y en el que peor forma me he encontrado. Dolores, un día la pierna derecha, otro la izquierda, otro el lumbago, el cuello, sobrecarga en los tendones,.. ¿Me estaré haciendo mayor? ¿Necesito descansar?
Las clásicas anotaciones a pie de página de lecturas clásicas, pequeñas frases con ideas certeras que después intentaba desarrollar, se han quedado en eso, “pequeñas”:
“No cuentas más que contigo mismo…”
“Nadie debería estar solo en su vejez. Pero es inevitable”
“Tal vez no debería ser corredor, pero para eso he nacido”
Un sinfín de frases de un pequeño libro que cuando era niño no tenían la significación que en esta relectura he encontrado.
¿Nunca os ha pasado? Mejor no contarlo. Siempre he pensado que las alegrías no podían ser completas, llegaría ese momento de desastre que pondría las cosas en su sitio. Si algo iba bien es porque algo estaba fallando.
Una compra, el aparato no funcionaría o me faltaría algún cable; unas vacaciones, al final caería enfermo; una película, una decepción; una compañera, la relación se degradaría en el tiempo; un juguete, no llegaría… Si deseaba que algo no sucediese sólo tenía que contarlo y ya perdía su fuerza. Estaba garantizado el exorcismo de las palabras.
Se me hace tarde. Tenemos que hacer las maletas y pronto habrá que estar preparado.
Un beso muy fuerte [*].
Pepinho.
[*] Se dice “un fuerte abrazo” o “un beso”, a mí también me gusta la efusividad de “un fuerte beso”.
Ingredientes
- 140 gr. de harina de repostería.
- 35 gr. de cacao en polvo puro.
- Un pizca de sal.
- 1 cucharilla de té (completa) de levadura química (4 gr.) (Royal)
- 140 gr. de mantequilla.
- 37 gr. de aceite suave.
- 175 gr. de azúcar.
- 180 gr. de huevos (3 grandes)
- 50 gr. de chocolate negro 70% troceado grueso.
- 50 gr. de frutas confitadas troceadas (no gruesas).
- 125 gr. de confitura de frambuesa sin semillas.
- 120 ml. de agua.
- 112 gr. de azúcar.
- 30 ml. de ron o licor kirsch.
Picamos el chocolate negro en trozos de medio centímetro o algo mayores. Mezclamos la harina con una pizca de sal, el cacao en polvo, la levadura química, el chocolate troceado y las frutas confitadas. Reservamos.
(2) En un cuenco grande vertemos la mantequilla reblandecida, el aceite, el azúcar y los huevos. Montamos (emulsionamos) con un batidor eléctrico de varillas (un levanta-claras) (es importante) durante unos cinco minutos, justo hasta que la mantequilla no tenga grumos y tenga el aspecto de una nata a medio montar. Si nos pasamos podría llegar a cortarse, tampoco sería un problema. Con ayuda de una espátula de plástico, vertemos delicadamente la mezcla de harina, de modo envolvente, desde el centro hacia los bordes y de abajo a arriba.
(3) Vertemos unos 2/3 de la masa sobre el molde y introducimos los discos de frambuesa congelados. Cubrimos con el tercio restante y justo antes de introducir el cake en el horno bajamos la temperatura hasta unos 180ºC, o algo menos, un cake no debe cocerse a más temperatura. Así aseguramos que durante los primeros minutos tendrá la temperatura adecuada para que crezca, después se hará de modo más homogéneo en el interior. Cocinamos en el horno precalentado cerca de unos 50 minutos, justo hasta el momento en que pinchando con una brocheta o cuchillo salga limpio.
Como norma general suelo programar la alarma para que suene unos 10 minutos antes, compruebo la cocción y vuelvo a programar la alarma para que suele algo después, dependiendo del estado que presente.
(4) Cuando esté hecho introducimos el molde en un baño de agua fría para que no siga cociéndose. Desmoldamos. Preparamos un jarabe con el agua y el azúcar hasta que hierva, retiramos y añadimos el licor. Con el cake todavía caliente, nos ayudamos de un pincel para empapar el pastel con el jarabe, hasta que esté bien mojado por todos lados (utilizares casi todo el jarabe). Cuando haya enfriado envolvemos en película transparente e introducimos en el frigorífico hasta el momento de consumir.
Si queremos darle todavía más calidad, el punto óptimo del cake empieza pasadas unas 36-48 horas. Antes estará riquísimo, después insuperable. Envuelto en película de cocina en el frigorífico se conserva muchos días (durante una semana delicioso, después nunca lo he probado) y nunca se resecará.
Os sorprenderá, seguro. Yo recomendaría hacerlo dos días antes del momento de degustar, estará en su estado óptimo.
Hacerlo o no están en vuestras manos, “quiera o no”.
Pepinho! Cómo has estado? Tanto tiempo, verdad?
ResponderEliminarPaso a saludarte y saber de ti. También con qué nuevas recetas nos sorprendes y mimas a nuestro paladar.
Te comento que hice tu pastel de plátano con streusel de almendras al cardamomo y ha quedado bien mñami :) Y debo agradecerte porque me has dejado de maravilla con los papis de mi novio jeje! Mi suegrita dijo al probarlo que es "una sinfonía de sabores, sublime", lo cual ha sido todo un elogio que también te toca a ti por ser tan buen profe a la distancia. En este timpo también me he dedicado a hacer muchas otras de tus recetas y ahora (por estos días) tendré que hacer un "stop" porque se viene el estreno de una obra en la que estoy depositando mi creatividad el diseño de luces y escenografía. Como puedes ver las artes (ya sean culinarias ,escenográficas o de otro tipo) siempre andan presentes por aquí.
Aprovecho a desearles muy buen vieje a ti y a tu chica ;) Seguro disfrutarán mucho y descubrirán nuevas cosas también. Me preguntaba a qué parte de Oriente se estarán dirigiendo y si nos invitarás a conocer esos paisajes con algunas de tus fotos. Qué lindo viajar y permitirse descubrir todo lo que muchas veces nos resulta inimaginable o distante.
Bueno, me despido hasta la próxima con un abrazote oso :) Besitos,
Pia
Hola Pepinho ....y adios! porque ya te estàs yendo! Por Dios cuantos viajes (y no hablo por el sentido econòmico) es por el desgaste por Dios ese hacer y deshacer maletas, estaba pensando que mi hermana es como M o se le parece, siempre que le pregunto a mi mamà por ella està viajando o por viajar no importa donde, ha viajado a muchas partes y sè a veces porque deja a la màs pequeña de sus hijas con mi mamà, incluso viaja mucho dentro de Chile, bueno yo me streso sòlo de pensarlo. Y ahora me estaba preguntando para que escribo aquì? para quien? quien me leerá o le importará? lo que digo, tantos mensajes perdidos, tanto amor botado o desperdiciado, no sè.
ResponderEliminarTe iba a preguntar que cuando apareciò este viaje pero da lo mismo.
Sinceramente te deso un buen viaje y que estès bien, Dios te cuidarà aunque no te guste. cariños, Gloria
Qué barbaridad, cuanto amorencor (palabra que acabo de inventar ^^).
ResponderEliminarEN fin, que yo venía a por recetas y me encuentro con LA RECETA ;D
Chocolate + Frambuesa = Chupi
Las frutas confitadas las obviaré, a mí particularmente no me gustan nada, que lo rojo es fresa, lo amarillo limón, pero ¿y lo verde qué diablos es?... ehr... thanks but no, thanks.
Total, que probaré, variando las 'cosas de colores' por... por...
...¿bolas de Toffee congeladas que se fundan por el centro del Cake conforme éste vaya haciéndose...? ¿rollo chachi-coulant? ¿y si me lo como en caliente? ay ay ay...
Toffee, Chocolate, Frambuesa, a ver qué sale de ahí...
Gracias por la receta y Bon Voyage!!
Fuertes Saludos (¡a gritos!) then,
iRaiDa
EDIT: por cierto... sobre las confituras y mermeladas... soy (era) bastante fiel (adicta) a la marca 'La Vieja Fábrica', de hecho la considero una de las mejores, pura fruta de verdad... hasta que conocí (y he ahí mi desgracia) la marca 'St. Dalfour', ¿conoces Harry?.
ResponderEliminarEn serio, pruébala (¡pruébenla[s]!), sobre todo 'Four Fruits', porque yo no podría describirlas... pero con algo realmente especial no un simple cuscurro de pan ;( que son algo carillas pero pura Ambrosía...
Dejo enlace a la página de la marca en Castellano (yo las encuentro en Alcampo normalmente), que no sé si molestará lo de la publi... en todo caso, perdón de antemano.
http://www.stdalfour.com/home.aspx?id=93&selection=0&langid=4
Ahora sí que sí, chispum.
iRaiDa
P/s: Algo llamado 'Rhapsodie De Fruit' debe ser pecado, a fuerza... :rubor:
Perdona Iraida pero no es amor/rencor, no le tengo rencor,toto lo contrario, por Dios, yo sabìa que me iba a pasar esto, él sabe por que le digo, uff me jor me voy.Gloria
ResponderEliminarAunque me das una lata atroz quiero aclarar mis palabras, Pepinho sabe a que mensajes me refiero`.
ResponderEliminarTengo muchos defectos pero no soy rencorosa, de veras, siento que me hayas interpretado asì.
Y por ùltimo me refiero a que antes yo venìa aqui y contaba cosas mìas ahora no me atrevo, no sè a quien le hablo, como le voy a hablar a alguien que no està.
Seguramente en mis palabras lo que hay es dolor, porque el ultimo tiempo he vivido cosas muy dificiles y dolorosas y ahora no las puedo compartir, antes me ayudaba.
Eso serìa, Gloria
hola y adios como dirian por aqui.Me alegro que te vuelvas a ir, relajacion (es broma) oriente, ir contar volver.Me alegro de que casi estes volviendo pensamiento optimista.Me alegro de este cake, una vez hize casi lo mismo en una sache, y encontrarse un trozo de fresa-frambuesa junto con el choco es memorable..como lo sera que vuelvas de nuevo y tu espiritu tambien este.Me alegro.Beso
ResponderEliminarUmmm!
ResponderEliminarOtra vez recetas ricas. Eses panecillos, probaré a hacerlos. Muy rico todo.
En breve empieza el curso, la vuelta al trabajo, en fin que se acaban las vacaciones para todos, ya todo será como antes, eso espero...
Gloria, el agua siempre vuelve a su cauce; no te preocupes estoy segura que en cuanto recuperemos el ritmo de trabajo (se acaben las vacaciones) estaremos todos por aquí de nuevo, mientras tanto nos toca esperar pero valdrá la pena.
Un beso.
¡¡HoLa GLoRia!!
ResponderEliminarOops!!, perdona si te molestó el comentario, de verdad que no iba con malicia ni nada parecido, que yo no tengo ni idea de las cosas de ustedes (Harry y tú) y no me meto ni me metería, era un comentario de bromita por lo apenada que se te nota en casi todos los mensajes que dejas, en realidad me da penita.
Sobre lo de que nadie te lee, no creo que sea cierto, ¡fíjate!, tú y yo ahora mismo nos estamos respondiendo ;) (en serio, sí que hay gente que entramos aquí para algo más que ver recetas y a mí me gusta mucho los ánimos que das a Harry y al resto).
Un beso grande Gloria y de nuevo perdona si te molestó el comentario.
iRaiDa
Iraida de verdad que no pensé que lo hicieras con mala intención sólo pensé que no me conocías. Te daré un resumen muy breve porque no puedo hablar mucho ahora. Mi papá ha estado super enfermo (corazon) y toda vía no arriba bien, me preocupa porque como que se dejado estar antes venian todo los fines de semana, ahora hace como dos meses queno vienen.
ResponderEliminarMi hija (muchas saben) a pasado por una época super oscura, tremenda en que incluso se ha hecho cortes (sin mayor daño) estoy con ell en el psicólogo y ahora estamos también con la psquiatra porque era neceario darle remedios y esos sólo lo dan los siquiatras, a pesar de que los remedios algo la han ayudado el camino como dice mi amiga/hermana Alicia de Córdova es muy largo a veces avanzas, a veces retrocedes.
pepinho y muchos de aquí siempre me han apoyado y eso es lo que echo de menos. Sé que muchos están de vacaciones, yo tengo un blo pero sólo pongo recetas y hago uno que otro comentario porque además es en inglés y español.
Perdoname a mí no quiese parecer molesta, sólo estoy triste. Muchos cariños. A veces una espera más de los amigos (pepinho) y no es posible, es así no más. Cariños, y en paz. Gloria
Has visto la receta que nos has colgado?????? Qué pasada!!!!!
ResponderEliminarBuen viaje, rico cake y ahora voy a dejar un abrazo a Gloria.
ResponderEliminarhola otra vez, comentamos para informarte de que hemos hecho un post en tu honor en nuestro blog.
ResponderEliminarciao
no se para ke complicarme con palabras y mas palabras cuando se pueden decir las cosas claras: ERES LA OSTIA
ResponderEliminarke un hombre joven haga esas locuras de postres ya es alucinante, pero a parte de eso... como lo haces? como haces tantas cosas en tu vida, y encima compartes dulzura con todo el ke la kiera recibir? ke misterio.
solo diré GRACIAS
Las dos recetas como siempre, estupendas, no dejas de sorprenderme.
ResponderEliminarBueno de nuevo de viaje, disfrutalo
y a ver si a la vuelta puedes por fin descansar.
Por cierto cual es la "tierra de las gominolas" me has dejado intrigada, ya nos contaras y esperamos también alguna foto, para viajar contigo.
Un beso enorme para Gloria, espero que todo vaya mejor, y no te preocupes, las vacaciones se acaban y poco a poco todos regresan.
Un abrazo Pilar.
Ese anónimo de "ERES LA OSTIA"... JAJAJA me ha encantado pues yo siempre pienso lo mismo...mi marido me hizo en una ocasión una comida en la que yo le expliqué paso a paso como debía proceder, y yo tan contenta por esa hazaña; luego siempre me hace de "cho" (nombre que se da al ayudante de cocina en los barcos)puesto que le gusta estar conmigo mientras cocino e ir preparando lo que necesito, ya sea picar verduras, batir huevos,... y yo con eso estoy satisfecha pero este hombre es un fenómeno...¿quién no lo quiere en su casa?...
ResponderEliminarGloria, cariño ya ves que poco a poco esto vuelve a ser lo de antes contestándonos unos a otros. Yo no te hago ningún comentario en tu blog por miedo a meter la pata puesto que allí no hablas de como estás pero no dudes que todos los que te leemos estamos preocupados por ti y por los tuyos, espero que tengas suerte (esto si ya te lo he dicho antes) y todo salga bien, la Espe adelante que es muy joven para no querer disfrutar de la vida y tu papá como no, espero de corazón que se mejore pronto. Un beso tesoro. A propósito el viernes, o sábado no recuerdo bien, me pasé por el blog de Berta pues también la echo de menos aquí y me encontré con tu comentario así que opté por no poner el mío ya para no cansar pero... Berta, que sepas que se echan de menos tus palabras y espero que estés bien de salud. Un beso a todos.
como decimos por aqui, andas de pata de chucho(perro), que quiere decir que andas de callejero en este caso de viajero...
ResponderEliminaryo se que a lo mejor no te das tus vueltas a otros blogs , espero que visites el mio ya que por alli me atrevi a hablar de tu blog y de ti, espero que no te moleste...
y sigue disfrutando de tus viajes, hay nos contaras cuando regreses de las maravillas
y no nos dejes por mucho tiempo...
Gracias Pilar, Mado, gracias cibercuoca, Claudia, les agradezco mucho el cariño, Si yo tambien estaba preocupada por Berta como ha estado enferma por eso le dejè el mensaje y me parece raro no saber nada de ella, ojalà este bien.
ResponderEliminarMado me alegra mucho cuando me dejas un mensajito en el Blog. Hoy fue Cibercuoca (que es un amor) y la Claudia, y la Alicia de Còrdoba siempre me escribe por mail, Cariños a Todas. Gloria
Holaaaaa Pepinho... y a todos!!! Tenía ganas de volver al trabajo para poder pasar por aquí! Bueno, ya dije una vez que en casa no tengo Internet, y que nunca me había interesado, hasta que te 'conocí', Pepinho (por cierto, hace ya casi un año, y sin perderme tantos días como ahora, qué rabia!). El último día que pasé tranquilamente por aquí (también lo pude hacer desde ordenador ajeno, en la playa, pero sin casi tiempo, claro) acababa de pasar lo del funesto anónimo. Me dejó alucinada y sólo se me ocurrió decirle que qué hacía aquí, realmente se me ocurrieron muchas más cosas, pero preferí ignorarlo, al fin y al cabo, lo que buscaba era la polémica. Ahora, al volver, antes de ponerme a escribir, he echado un vistazo a los días pasados (como hago al volver de los 'findes') y me ha sorprendido que le dieras tanta cancha, me da rabia que hayas perdido tantas palabras en contestar esa chorrada. Aunque digas que todo está olvidado, me sigue pareciendo un/una idiota. Como dices que pasa por aquí, supongo que lo leerá...
ResponderEliminarEntre las cosas que te he leído, me ha gustado la reflexión sobre la envidia... Creo que ese es el problema de 'anónimo'. Los 'grandes'... ¿quién son? He hecho más recetas tuyas que de cualquier otro; aunque tú las hayas sacado de otros, a mí me sirven como me las explicas tú. ¿Sabes cuantos libros de cocina tengo? Pues de las pocas recetas de ellos que me he decidido a hacer, siempre me he encontrado con alguna laguna que me ha hecho perderme. Y ya no me compro más, te prefiero a tí (bueno, y como decías una vez, hojear los libros en los almacenes y anotar cosillas cuando salgo ;·) ).
Espero 'amb candeletes', como decimos por aquí (seguro que me entiendes, dado que otras veces ya he visto que dominas el catalán... ¿te enseña tu hermano?), esas magdalenas de Nutella. Yo hice un día muffins de Nutella, se le ponía una cucharada en media de la mezcla y luego se acababa de echar masa, y quedaron buenísimos. Por cierto, me costó unos cuantos fracasos con los muffins entender que lo de no mezclar en demasía la masa no era cuestión baladí. Je, je.
Hablando de tu hermanito, yo también había cometido 'fechorías' de ese tipo cuando era veinteañera (no yo sola, claro!, esas cosas siempre se hacen en grupo). Recuerdo un cocinero de esos que te dicen el menú en la puerta de los bares. Se lo llevó mi amigo Pedro y lo puso a dormir en la cama de al lado. Al día siguiente hacía callar a su madre en voz baja (sssss) para que no despertara a su amigo 'Manolito'.
Ah!, qué es la Tierra de las Gominolas??? Que te, os, vaya bien por ahí y ya nos dirás a qué saben sus nubes. Qué pena de coincidir, pero pasadlo súper, y BESOOOOS!!!
GLORIA!!! También he pensado mucho en ti y en cómo estarían el papi y la Esperanza, mucho ánimo y a ver si te amanece con un supersol, te lo mereces. Recibe un besote. Y a todas las que hablamos siempre... Paulova, Tessera, Karme, La Repor, Berta... nos 'vemos' por aquí. Abrazos!!
Hola pepiño.
ResponderEliminarAcabo de descubrir tu blog de casualidad y ya me lo he apuntado.
Esta receta LA VOY A HACER en mayúsculas porque una mezcla tan impresionante como chocolate y frambuesa no se puede dejar pasar.
Casi puedo imaginarme como sabe... mmmm.
Un besiño!!
Mezquita
Gracias Rosita,gracias, Gloria
ResponderEliminar(Estoy de acuerdo contigo que pepinho le dio mucha importancia al anónimo pero él es el dueño aqui)
Eii! Gloria, estuve viendo tu blog. Qué bueno todo, esa pizza, esas empanadas, el pastel tan blanquito...
ResponderEliminarTe escribí un mensaje, pero no supe enviarlo o no sé qué pasó, que no me dejó. Soy bastante inútil para estas cosas aún, porque ni siquiera sé explicarlo. Je, Je. Besos y felicitaciones por tu obra.
Rosita no te compliques en mi blog también puedes escribir como anónimo y abajos pones soy Rosita, cuando quieras me vas a ver, muchos besos, Gloria
ResponderEliminar(Mujer, vieras tú lo que me ha costado aprender algunas cosas y no pregunto porque los niños me dicen de blogs yo o sé nada, sería todo!!)
Pepinho queria darte las gracias por todas las maravillosas recetas que compartes con nosotr@s. He preparado el "Pan de platano (Banana Bread)" y he de decir que esta riquisimo, bueno la verdad que como todas tus recetas que voy probando.
ResponderEliminarUn beso para ti (espero vuelvas pronto, se te echa de menos), y tambien a tod@s los demás, como estais...Gloria, Tessera, Paulova, Berta, Olga, La Repor, etc...?
Hola Pilar y compañía!!
ResponderEliminarya estoy de nuevo conectada al cibermundo. Por fín! Lo que lo he echado de menos!!!!
Cómo que ahora a oriente=? ESte hombre no para. A ver qué cuenta cuando vuelva, que así viajamos un poquito con él y sus fotos.
Yo no he tenido tiempo de hacer ninguna receta, pero prometo espabilar esta semana. Besos a todas, que no sé dónde os meteis.
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ResponderEliminarAlucino, cualquier firma que no sea ESCRITA DESDE MI CUENTA NO SOY YO... EL CIBERESPACIO ESTÁ LLENO DE AMARGADOS que se encargan de fastidiar a los que nos tomamos las cosas en SERIO.
ResponderEliminarBorro el mensaje, sea de quién sea.
pepinho.
Yo nunca trataría a un amigo de "usted" ("no hallan...").
ResponderEliminarBesos.
Estas piedras que me encuentro en el camino son las que me animan a dejar esto de una vez.
ResponderEliminarExcelente este cake. Te diré que lo ha comido hasta un ministro y le ha encantado, jajajaja. lo volveré a hacer pero en vez de frutas confitadas a ver que le pongo, es que a mí no me gustan nada
ResponderEliminarI.